La escuela de arte
Publicado por Ana Lógica , sábado, 19 de septiembre de 2009 1:11
Hoy me sentí mayor cuando de nuevo crucé esa puerta de madera, subí las escaleras y ví a través de las paredes de cristal de las clases.
Me encontré con antiguos conserjes, profesores y alumnos, y otros conocidos que ahora ocupan mi lugar; en su lugar yo nunca creía llegar hasta donde hoy he llegado.
Para colmo el cielo encapotado acompañaba a la melancolía que había en el aire.
Siempre quise parar el tiempo hasta que alguien me dijo "aunque le quites la pila al reloj no conseguirás parar el tiempo", luego busqué otro método y cuando nadie me veía cerraba los ojos con fuerza y los apretaba pensando que así funcionaría, ahora ya sé que no puedo hacer nada (de momento, claro está!)
Me encontré con antiguos conserjes, profesores y alumnos, y otros conocidos que ahora ocupan mi lugar; en su lugar yo nunca creía llegar hasta donde hoy he llegado.
Para colmo el cielo encapotado acompañaba a la melancolía que había en el aire.
Siempre quise parar el tiempo hasta que alguien me dijo "aunque le quites la pila al reloj no conseguirás parar el tiempo", luego busqué otro método y cuando nadie me veía cerraba los ojos con fuerza y los apretaba pensando que así funcionaría, ahora ya sé que no puedo hacer nada (de momento, claro está!)
Deme, Yo Y Emilio, Patio de los Naranjos...*Gracias por mi melancolía a Deme, Emilio, Rafa y Aza (...y más)
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No es necesario parar el tiempo porque, precisamente gracias a él, guardamos los mejores momentos en pequeños cofres dorados de memoria.
No es tan dificil imaginarte y verte en esos pasillos por los que tu antes soñabas con ser quien eres ahora. Estoy seguro que la ilusión por caminar y crecer no cambia nunca...esa ilusión es la que te hace recordar lo mejor de tu pasado y el porvenir de lo que construyas para mañana.
Un abrazo muy fuerte